¿Qué es una tomografía computarizada?
Es un procedimiento médico que usa rayos X. La tecnología es similar a la que se emplea en una radiografía, pero aquí el haz de rayos X va girando alrededor del paciente haciendo varias capturas de su cuerpo.
Se centra en aquella zona que se quiere estudiar, para que después un programa informático vaya juntando todas esas imágenes generándolas en varios planos.
Da detalles de los huesos, las venas, sistemas blandos, etc., que las radiografías normales no proporcionan. De hecho, gracias a esta tecnología es posible identificar lesiones muy pequeñas.
Diferencia con otros procesos que usan la imagen
Hay quienes comparan a la TC con la resonancia magnética, pero la tomografía es más rápida y tolera mejor los movimientos del paciente. Eso sí, la TC emplea radiación ionizante, aunque en dosis seguras.
Otro procedimiento similar es la ecografía. Aquí no hay radiación, pero cuando se trata de estudiar estructuras profundas, su resolución es más baja. Además, para que sea efectiva, la persona que la lleva a cabo debe tener mucha experiencia.
¿Cómo se realiza una tomografía computarizada?
Estamos ante un proceso muy sencillo que empieza con la preparación, la que no siempre es necesaria. Lo usual es que ni siquiera se requiera que el paciente vaya en ayunas, algo que sí se pide si se va a utilizar un medio de contraste.
Si se emplea este, se solicita que de cuatro a seis horas antes de la prueba solo se beba agua y no se ingiera ningún sólido.
También se revisa el historial del paciente para ver cómo le funciona el riñón y si es alérgico al contraste (que no siempre se usa).
El proceso paso a paso
Todo comienza con la llegada del paciente y la entrega de la documentación si es necesaria, como el papel de la cita, en el que se dice de qué forma se lleva a cabo la prueba, etc.
El paciente se tumba y se le inserta una vía si va a llevar contraste, el cual se le administra a lo largo del proceso.
Ya en la camilla, los técnicos suelen colocar apoyos con el fin de que el paciente esté más cómodo, por ejemplo, en la zona de la cabeza. Además, en determinados casos se le inmoviliza con correas para que se mueva lo menos posible.
La camilla se mete dentro del túnel y se hacen los barridos. Se suele solicitar al enfermo que aguante la respiración unos segundos, ya que así las imágenes son mejores.
Cuando se obtienen las imágenes necesarias, el paciente se puede ir. Si se le ha puesto contraste, se le quita la vía y se lo mantiene unos minutos en observación.
¿Cómo se realiza una tomografía computarizada?
Estamos ante un proceso muy sencillo que empieza con la preparación, la que no siempre es necesaria. Lo usual es que ni siquiera se requiera que el paciente vaya en ayunas, algo que sí se pide si se va a utilizar un medio de contraste.
Si se emplea este, se solicita que de cuatro a seis horas antes de la prueba solo se beba agua y no se ingiera ningún sólido.
También se revisa el historial del paciente para ver cómo le funciona el riñón y si es alérgico al contraste (que no siempre se usa).
El proceso paso a paso
Todo comienza con la llegada del paciente y la entrega de la documentación si es necesaria, como el papel de la cita, en el que se dice de qué forma se lleva a cabo la prueba, etc.
El paciente se tumba y se le inserta una vía si va a llevar contraste, el cual se le administra a lo largo del proceso.
Ya en la camilla, los técnicos suelen colocar apoyos con el fin de que el paciente esté más cómodo, por ejemplo, en la zona de la cabeza. Además, en determinados casos se le inmoviliza con correas para que se mueva lo menos posible.
La camilla se mete dentro del túnel y se hacen los barridos. Se suele solicitar al enfermo que aguante la respiración unos segundos, ya que así las imágenes son mejores.
Cuando se obtienen las imágenes necesarias, el paciente se puede ir. Si se le ha puesto contraste, se le quita la vía y se lo mantiene unos minutos en observación.
Importancia de la tomografía computarizada en la salud
Tiene una gran importancia, puesto que la tomografía computarizada ayuda a detectar enfermedades graves de manera temprana. De ese modo, la supervivencia de los pacientes es mayor.
Además, contribuye a la hora de poder planificar cirugías o radioterapias. Como se tiene toda la información en imágenes de gran calidad, esto permite que los tratamientos sean más precisos y que se conserven los tejidos sanos.
Por ejemplo, con las personas mayores, la tomografía computarizada se usa mucho a la hora de realizar cribados para detectar cardiopatías y el cáncer de pulmón. Así, se consigue dar con estas enfermedades en épocas tempranas y enfocar los tratamientos con una mayor eficacia.