Otorrinolaringología infantil
La otorrinolaringología infantil centra su atención en el cuidado y tratamiento de dolencias relacionadas con los oídos, la nariz, la garganta y la laringe de los niños, acompañándolos desde su nacimiento hasta que alcanzan la adolescencia.
¿Por qué el servicio de otorrinolaringología infantil es imprescindible en medicina?
Estos profesionales de la medicina han destinado todos sus esfuerzos a mejorar la calidad de vida de los jóvenes, ayudándoles con problemas de diversa índole. Lo hacen mediante tratamiento médico o los procesos quirúrgicos necesarios para los correctos desarrollo y funcionamiento de los importantes sistemas englobados en la otorrinolaringología.
Los otorrinolaringólogos pediátricos tienen una sensibilidad especial a la hora de localizar el foco del inconveniente a tratar. Un plus añadido, teniendo en cuenta la dificultad que supone que el menor no sepa detallar con exactitud qué le sucede o explicar con acierto el problema que ha provocado que sus padres confíen en un especialista.
Este profesional cuenta con la experiencia y las herramientas oportunas para crear un ambiente cómodo para el niño; restar importancia a cada protocolo, explicándoles el procedimiento; y generar un vínculo de confianza necesario para el desarrollo de su labor.
¿Cuándo acudir a un pediatra otorrinolaringólogo?
Se debe acudir a la consulta de otorrinolaringología cuando el niño presente diversas alteraciones en su sistema respiratorio o auditivo. También cuando se observen gripes recurrentes que requieren el uso de antibióticos, así como ronquidos, malestar respiratorio mientras duerme o ruidos extraños cuando llora. Una problemática, por otro lado, habitual en estas edades, pues es cuando más problemas de esta naturaleza se presentan.
De hecho, al nacer y en los primeros años de vida, es cuando se termina de desarrollar el tracto auditivo. Además, se trata del periodo vital en el que se pueden observar alteraciones tan comunes como infecciones o la pérdida de audición por la acumulación de mucosidad en la trompa de Eustaquio, la cual conecta el oído con la nariz. También es el momento en el que toca lidiar con las sinusitis y las amigdalitis, las cuales son responsables de episodios de ronquidos y saltos respiratorios en el sueño, que dificultan el descanso por las noches. Otros males habituales en los más pequeños son la rinitis, que provoca sangrados nasales; y otras enfermedades alérgicas que, deben ser estudiadas y tratadas para encontrar la mejor solución posible.
Para ello, el otorrinolaringólogo sustentará su diagnóstico en diversas pruebas médicas. Se realizarán a través de un examen exhaustivo de los oídos, la nariz y la garganta, así como de las cuerdas vocales, para localizar posibles afecciones. Con estos procedimientos y la propia experiencia del especialista, se podrán localizar, de forma certera, la afección, las posibles causas y, lo más importante, el tratamiento a seguir para solventarla.
¿Dónde puedo encontrar un otorrinolaringólogo pediátrico?
Los otorrinolaringólogos pediátricos desempeñan su labor en diversos puntos y red de hospitales de niños, centros universitarios y consultorios privados en todo España.
Acude a tu pediatra para que te ayude a buscar un otorrinolaringólogo infantil certificado y avalado por las autoridades competentes.
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Como hemos visto, los otorrinolaringólogos pediátricos prestan sus servicios a los niños para asegurar que su vida adulta sea la de una persona sana, ayudándole desde edad temprana con enfermedades relacionadas con los oídos, nariz y garganta.
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